Me perdí
de ir a celebrar "EL DÍA DE LA NIÑEZ Y LA RECREACIÓN” hoy domingo 6 de mayo en
el Malecón (y no el último sábado de abril como dice la ley 724 de 2001); a cambio
escuché el programa de Caracol SAL Y PIMIENTA con la periodista María Isabel
Rueda y sus invitados concejales de Bogotá en una discusión que me dio nostalgia: ANALIZABAN EL PLAN DE DESARROLLO DE BOGOTÁ y
las posibilidades de la administración distrital para llevarlo a cabo. Me sorprendió que tengan como pilar fundamental
el apoyo a la primera infancia.
Digo que
me dio nostalgia porque, cómo se añora un equipo de profesionales de la radio o
la televisión, con los diputados y concejales de la Comisión del Plan de
Dearrollo, haciendo un análisis juicioso de los planes DEL DEPARTAMENTO Y DEL MUNICIPIO CAPITAL; a estos hay que agregar el del Área
Metropolitana, por aquello de que somos una de las trece áreas metropolitanas
del país.
Aquí parece
que los PDM están en la trastienda, lejos del dominio público, como si eso
fuera tarea de algunos ungidos (asamblea y concejo) y no un tema de la mayor
importancia, porque justamente es la
HOJA DE RUTA que se traza para regir el destino de miles de personas
durante muchos años; como digo, la escasísima difusión lleva a un
nulísimo debate en los medios; si es que
llega a los medios y si llega es con una nota de medio pelo que se limita
simplemente a copiarse del comunicado de las oficinas de prensa, sin
cuestionar, preguntar, debatir y motivar a la ciudadanía para que salga del marasmo
y del sopor que dan los súperconciertos; aplican la norma al pueblo pan y
circo, claro aquí sólo un circo pobre que da grima.
Que bueno
que así como hacen debates con los candidatos
con preguntas de cómo resolverían los problemas sin son elegidos, se hicieran muchos DEBATES con lo que el nuevo mandatario se
propone realizar ya en funciones. Así como el candidato habló con los medios, gremios, estudiantes,
amas de casa y hasta con el perro, de los maravillosos castillos en el aire y
globos de aire caliente que de seguro pondría todo su empeño en realizar, - y
les comimos el cuento- tenían de enero a
abril para proponer un análisis consensuado y participativo con todos los
sectores y propiciar la participación ciudadana con buzones de sugerencias para
enriquecer el Plan, líneas de información, redes sociales y utilizar el famoso
gobierno en línea, no para mostrarse cual vedette decadente, sino rodeándose de
la ciudadanía para pasar a la historia y a la memoria colectiva como EL MEJOR
DIRIGENTE. Que lo diga la gente y no una
lejana encuesta.
De lo que
se plantee en el plan de desarrollo (consecuente con el programa de gobierno
inscrito para hacerse elegir) se infiere el mejoramiento o empeoramiento de las
condiciones del desarrollo económico y social del departamento y del municipio.
Las líneas
de base, de infancia y adolescencia por ejemplo, no se conocen ni se
discuten: lo feo: alto índice de
embarazo adolescencia, muerte de niños
menores de 1 y de cinco años, cientos de niños maltratados y abusados, con
hambre y sin escuelas de calidad, alto número de jóvenes en conflicto con la
ley por porte y consumo, trabajo infantil, explotación sexual y un larguísimo etc., de 65 indicadores
sociales, que se deben reflejar exactamente en el PDM; estarán refundidos en alguno de los “pilares”? lo bueno:
el PDM ya está en profundo análisis en
concejos y asambleas; la esperanza:
que representen al pueblo que los eligió, analicen, debatan, exijan, no
traguen entero, no callen su voz por
puesticos burocráticos de tres meses, hablen de frente y cumplan su
compromiso. Si lo hacen el pueblo y la
patria os lo agradecerán.